Este destino ofrece una experiencia única para los amantes del mar, con paisajes costeros impresionantes y la oportunidad de disfrutar de la vida marina local.

El arte: Consiste en una estructura en forma de saco, formado por tres piezas principales: la superior donde van los flotadores que abren la boca del arte. Esta parte es más larga que la de abajo para evitar que el pescado escape; en la inferior está el plomo y se arrastra por el fondo y la corona, donde permanece el pescado que ha entrado por la boca.
La técnica: Salen a las 7 de la mañana en busca del lugar de pesca, allí sueltan el arte que va unido a la barca mediante cables muy largos y resistentes; éstos van sujetos a unas puertas que ayudarán a abrir la boca del arte. La red es arrastrada por el fondo durante un par o tres de horas. Transcurrido el tiempo se sube a bordo el arte y se selecciona el pescado.